Los datos relacionados con edificios energéticamente ineficientes pueden ser útiles para arquitectos y planificadores urbanos que pueden usarlos para tomar medidas. Dichos datos pueden ayudar a identificar estructuras que pueden adaptarse para que sean más sostenibles o áreas donde el efecto de las "islas de calor urbanas" debe contrarrestarse plantando más árboles, por ejemplo.
Recientemente, la compañía de tecnología británica SatVu puso en órbita un satélite especial con un cohete Space X. Descrito como "un termómetro en el cielo", el satélite Hotsat-1 está diseñado para registrar edificios energéticamente ineficientes, acelerando así el proceso de recopilación de datos. El Hotsat-1 está equipado con tecnología avanzada de imágenes térmicas y es capaz de producir imágenes con una resolución lo suficientemente alta "para proporcionar datos de temperatura específicos para cualquier estructura del planeta".
Según el cofundador y director ejecutivo de SatVu, Anthony Baker, "Hotsat-1 representa un cambio de paradigma en la tecnología comercial de imágenes térmicas".
Crédito de la imagen: SatVu
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