Toshimaya es una empresa de confitería, que para llevar a cabo sus pedidos necesitaba un vehículo de reparto que fuese lo suficientemente compacto como para circular por las calles estrechas en la Prefectura de Kamakura, situada justo al sur de Tokio, Japón. Para realizar un modelo totalmente funcional Toshimaya se puso en contacto con Honda que colaboró con los especialistas en impresión 3D de Kabuku para llegar a una solución efectiva.
El vehículo de reparto resultante no es un coche de tamaño completo, sino más bien un pequeño mini-coche que cuenta con espacio suficiente para un conductor y un maletero que puede ser llenado de productos de confitería para su reparto.
Lo importante acerca de este ejemplo de vehículo automotriz impreso en 3D es que es altamente especializado para un solo propósito, lo que indica que existe un gran potencial para algunas empresas que en el futuro necesiten tener vehículos de reparto y otros coches hechos a medida de forma que puedan adaptarse a un conjunto muy específico de requisitos.
Referencias: 3ders org via : www.tecnoneo.com
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